Jamie Foxx ha atravesado meses difíciles. Hace tres meses, vivió uno de los momentos más delicados de su salud, siendo ingresado de urgencia debido a una “complicación médica” que ha generado diversas versiones, incluso se llegó a hablar de que estuvo cerca de la muerte. Ahora, tras tres meses de aquel acontecimiento, el propio actor ha decidido romper su silencio sobre su hospitalización, confesando que fue una experiencia “infernal”.

En un video compartido en su perfil de Instagram, expresó: “Fui al infierno y volví”. Foxx admitió lo lejos que llegó y lo difícil que fue su recuperación, mencionando que pasó por algo que nunca imaginó experimentar.

Aclara que aunque ha enfrentado desafíos, no está “ciego” ni “paralizado”. Su deseo era que lo vieran riendo, disfrutando de la vida, bromeando, trabajando en series o películas, y no en ese estado delicado en el que estuvo durante aquellos difíciles momentos.